No hay un piloto en el mundo que, al acercarse a un aeropuerto por primera vez no haya despreciado el paisaje implacable y bonito y no haya dicho: “¡El aeropuerto debe estar allí, pero no lo veo!”. El primer paso para encontrar algo es precisamente saber lo que estamos buscando. Con demasiada frecuencia, los pilotos buscamos un aeropuerto sin consultar un diagrama de aeropuerto o una carta o mapa.
¿Cuál es el diseño de la pista? Esto nos dirá qué formas estamos buscando. ¿Desde dónde nos estamos acercando? El aeropuerto más difícil de ver es uno con una única pista larga cuando te estás acercando perpendicularmente. Realmente ayuda saberlo de antemano. ¿Dónde está relacionado con algún punto de referencia obvio, como un lago o un cerro que este cerca?
En áreas residenciales ocupadas, debemos buscar el área que no está construida. Asimismo, de noche, un aeropuerto metropolitano está rodeado por un mar de luces, pero el aeropuerto en sí es a menudo el área oscura. Está menos iluminado que el vecindario urbano promedio. Busquemos entonces el agujero en las luces.
En los EEUU, encender la iluminación controlada por piloto, o cambiar el brillo, es una excelente manera de hacer que el aeropuerto salte por la noche. Hagamos esto cuando estemos a al menos cinco millas de distancia para la mayoría de las aproximaciones a unos tres mil pies sobre el campo.
Ver el beacon del aeropuerto es genial, pero no solo escaneemos a izquierda y derecha para buscarlo.
Mantengamos la mirada en una dirección particular durante al menos cinco segundos para que pueda ver el destello blanco y el destello verde. Es la combinación que muestra que hemos encontrado, finalmente, el aeropuerto.
Este Tip, ha sido preparado y compartido por nuestro Socio y actual Secretario de Junta Directiva Fernando Viaud ¡Muchas gracias!
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